MARTES: PRERROMÁNICO, MUSEO BELLAS ARTES...

ELENA SÁNCHEZ  –Hoy hemos ido a Oviedo y también nos ha hecho un día genial con sol y buen tiempo. Primera visita, San Julián de los Prados. Una iglesia preciosa de varios siglos de antigüedad. Las paredes interiores están pintadas como los tatoos, la pintura está incrustada en la piedra. También nos llamó la atención el Cristo crucificado suspendido encima del altar. Una pasada.

VIRGINIA –A continuación hemos ido a ver la catedral de Oviedo. La catedrlal de San Salvador. Resulta que es la tercera vez que se ha reconstruido, debido a su deterioro tras sucesivas guerras y asedios enemigos. Por eso presenta varios estilos; el gótico, el prerrománico y el románico... Le falta una torre debido a la falta de dinero para terminarla. Por dentro es impresionante. ¡Qué vidrieras! Allí está el Cristo del Salvador, hecho en piedra policromada. Dice una inscripción, "Quien va a Santiago y no al Salvador, visita al criado pero no a su Señor". Resulta que antes de ir a Santiago había que venir antes aquí.

JULIA –Fuimos al museo de Bellas Artes de Asturias. El museo aunque pequeño, muy chulo. Y sus pinturas, una pasada. Tienen obras de Goya, Sorolla, Picasso… importantísimos. Están ampliándolo porque como no caben todos los cuadros, los tienen guardados y los van cambiando.

AINOA –Dimos un paseo por todo Oviedo. ¡Qué cansancio! (CRISTINA –¡Y Ricardo no nos dejó comprar nada!) Tienen muchas esculturas en la calle, de autores como Botero y Úrculo. Había muchos turistas. Oviedo es muy bonito. Tiene muchas cosas.

VIRGINIA –Comimos en la cuenca minera en Langreo en un restaurante sidrería típico de Asturias. El suelo lo tienen lleno de serrín, para que la gente escancie la sidra natural tranquilamente. La comida fue genial. Nos divertimos mucho.

CRISTINA –Esto sí que fue lo mejor, el Museo de la Minería y la Industria. Fue lo más divertido hasta ahora. Chuli, chuli, chuli. Antes de bajar a la mina había un museo de maquinaria minera y montamos en una rueda de hámster gigante, que era una máquina muy antigua para extraer agua.

ELENA ÁLVAREZ –Bajamos a una mina en una jaula (ascensor). (JULIA –Al principio todos creíamos que bajábamos 600 metros y nos causó mucha impresión, pero al finalizar la visita subimos por unas escaleras y resultó que sólo habíamos bajado una planta.) Nos enseñaron como extraían el carbón y muchas cosas, como lo del gas grisú y lo del pájaro. Había que tener cuidado por donde pisábamos y no tropezar con los raíles.

AINOA –El recorrido por la mina fue impresionante, había poca luz y se oían los ruidos propios de la mina, vimos filtraciones de agua.

CRISTINA –Bajamos por una pendiente muy inclinada. Fue la visita que más nos ha gustado, de momento.